sábado, 6 de noviembre de 2010

Mi diario del miedo!

Escribe un diario de miedo




Para empezar a entender tus miedos afectan a tu vida cotidiana, escribe un diario, de este modo podrás observar los altibajos que te producen. No lo escribas para perderte en tus temores, sino para distanciarte de ellos y observa como llegan y se van. Así aprenderás a conocer las clases de miedos que tienes, sus ciclos y como te impiden ser tu mismo.
Empieza escribiendo tu diario el día que quieras y anota en él cada vez que sientas miedo, ya sea pequeño o grande, y el contexto en el que aparece, por ejemplo ¿Cada cuando surge?, ¿Implica a otras personas? O se trata de un miedo interior que no tiene nada que ver con el exterior, escribelo cada dia durante un mes, cuando sientas esos miedos. No lo leas hasta que pase ese mes. Cuando este tiempo transcurra , resérvate un rato tranquilo para leerlo todo el contenido, ¿Para que servira? Quiza te muestre que en tu vida hay un patron de miedo o tal vez te des cuenta de los miedos que no te habias percatado tener.Al escribir esta clase de miedo, en cualquiera de sus formas, te impiden ser tu mismo. Cuando hayas examinado tu diario en profundiad y estraido su escencia, quemalo con una actitud serena y respetuosa, e imagina que las llamas purifican y transforman la colección de patrones de miedo.


Ser tu mismo.





Cuando la persona acepta a ser mismo, ha logrado el máximo logro, empieza a aceptar quien eres, quien fuiste y quien serás. Cuando no puedes aceptar quien eres tu mismo, significa que tienes miedo, por eso el camino que lleva a la aceptación y a ser tu mismo empieza a liberarte de tus miedos. Cuando hayas aceptado quien eres estarás preparado para tomar otro camino mas avanzado.

Para comenzar a ser tu mismo comienza a vencer los miedos que compartes con los demás y conseguir la libertad exenta de miedos de la persona que eres. Aunque esto requiere valor. Cuando lo logres, empezarás ser tu mismo y el miedo dejará de atenazarte. Al alcanzar este valiente estado podrás despertar fuerzas espirituales del cambio. Lo puedes conseguir por el trabajo, la profesión, la familia, la formación intelectual, el desarrollo emocional o el despertar espiritual y también a través de la experiencia de un amor profundo.